Si es la primera vez que viajas a la capital de la Islas Baleares, lo primero que debes saber es lo bien que lo has hecho al elegir este destino.
Debido a la belleza que se pueden encontrar en sus innumerables rincones y al ser una de las principales ciudades turísticas de España, Palma de Mallorca puede ofrecerte una gran cantidad de cosas que ver y hacer. Pero aquí te vamos a contar aquellas que son obligatorias para apreciar la verdadera esencia de esta gran ciudad.
Camina por su casco antiguo, déjate sorprender por el barrio de la Lonja, sal de fiesta por su infinidad de pubs y discotecas de todos los estilos, aliméntate de su estupenda gastronomía en sus restaurantes, adéntrate en el encantador y tenue barrio de Santa Catalina, descubre su cantidad de instalaciones y eventos artísticos y diviértete en la variedad de sus conciertos y festivales. Y encuentra el mar, el agua de su paseo marítimo, el inconfundible barrio de pescadores de Portixol y su magnífica playa.
Como visitas complementarias y obligadas a las que te sentirás afortunado o afortunada de asistir están:
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Catedral-Basílica de Santa María
Esta majestuosa construcción de estilo gótico, conocida como La Seu en mallorquín, es el símbolo más importante de la ciudad.
Su belleza se realza desde fuera por mostrarse junto a las aguas de la bahía de Palma. Para los amantes del arte histórico, deben conocer que esta estructura asume una gran relevancia dentro del estilo gótico, al ser una de las obras con mayor elevación del viejo continente y en la que su rosetón es el más grande del mundo.
Su localización también contiene una intrahistoria digna de ser contada. El suelo de La Seu albergó anteriormente otra construcción de distinto estilo, pero también de gran importancia hasta la llegada del dictamen del rey Jaime I. Lo que albergaba ese lugar hasta la primera piedra que se puso para la construcción de la basílica, en honor a la “ayuda divina” que Santa María le concedió ante las dificultades que el mar les ofrecía antes de conquistar Mallorca, era una mezquita imponente de Medina Mayurca.
Ya desde el siglo XX podemos ver nuevos detalles en la catedral gracias a la gran mano de Gaudí. Un siglo después, alguien de la tierra como Miquel Barceló originó un amplio debate por su notoria intervención en la Capilla del Santísimo Sacramento.
2. Castillo de Bellver
Este castillo no está situado en la ciudad de Palma, pero debido a su importancia, belleza y proximidad (3 kilómetros los separan) te recomendamos que lo visites.
Su construcción está datada en el siglo XVI y fue comandada por el rey Jaime II, y aquí el estilo gótico sigue estando presente.
El nombre que le dieron a esta fortificación no es casualidad. “Bell ver” en el antiguo catalán significa “Bella vista”. Y tal nombramiento es consecuencia de las vistas que se pueden ver desde allí, al estar rodeado de un verde bosque y, al mismo tiempo, pudiendo se capaces de quedarnos maravillados al apreciar la sierra de la Tramuntana y toda la ciudad de Palma en el horizonte.
Como características propias y diferenciadoras de este castillo, hay que indicar la presencia circular en todos sus espacios y torres.
3. Palacio Real de la Almudaina
Nos encontramos ante una de las residencias de la realeza española. De estilo mudéjar y gótico, uno de sus atractivos es la posibilidad para el público de visitar algunas de las dependencias. Su interior es una oda al arte al contener piezas y cuadros únicos de distintos estilos.
Hasta aquí nuestras recomendaciones si vas a Mallorca. Recuerda que, si vas a alquilar coche, en Goldcar tenemos los precios más económicos 🙂 ¡Te deseamos buen viaje!